jueves, 16 de julio de 2009

no crea en milagros...

...dependa de ellos!
5ª ley de Finagle

No sé cual sea exactamente la definición de un milagro, pero supongo que es algo así como un hecho poco factible y que sucede al parecer por intervención divina.

Un milagro podría ser, por ejemplo, que una semana todos los operadores de la ruta nos apareciéramos por la base, otro podría ser que México desarrollara una cultura política y evolucionara tantito o que la Selección ganara un Mundial (chale… creo que sigo sangrando por la herida).

No sé si los milagros existen o suceden, tampoco sé si el destino juega con nosotros como quiere o si en efecto poseemos eso que llaman libre albedrío o si simplemente podemos atribuir todo a la casualidad.

Si soy una ferviente convencida de el dicho que reza “a Dios rogando y con el mazo dando”, vaya esperar que la vida así como así nos de todo lo que esperamos me resulta cómodo e incluso aburrido.

Por lo tanto, si queremos que un milagro suceda hay que darle una ayudadita.

Aunque tal vez sea que hemos desvirtuado el concepto de milagro. Como por ejemplo cuando nos topamos con alguien que hace mucho que no vemos y lo primero que decimos es “¡qué milagro!” como si las autoridades divinas tuvieran tiempo de ocuparse de sacar a alguien a la calle.

Pensándolo bien es posible que estemos rodeados de pequeños milagros que pasan sin darnos cuenta, como cuando a punto de cruzar la calle te detienes justo en el momento que pasa a toda velocidad un auto que no habías visto, o cuando ves dos coches que por milímetros no se hacen pedazos entre sí. La expresión generalmente también es “de milagro no sucedió” y si, ahí puede que alguien meta mano para evitarlo.

Milagro también es que yo me esté inspirando para escribir esto cuando esto a más de 10,000 pies de altura, con el estómago vacío y la neta es que nulas ganas de hacer todo lo que tengo que hacer en cuanto aterrice.

Como ya dijo alguien que usurpó el volante… milagro es que aquí andemos, escribiendo y diciendo algo… espero que si no relevante al menos entretenido.

Y si a alguien no le gusta, también sería un milagro que aportaran ideas y sugerencias que de milagro pueden ser atendidas.

1 comentario:

Juan Valdez dijo...

Un milagro es que descalifiquen al idiota que ocultó información para ganar y llamen al que le sigue para darle la medalla!

Sigues creyendo que "A Dios rogando y con el mazo dando"??